El Gobierno de esta ciudad colombiana desarrolla una estrategia que en los últimos dos meses ha frustrado las intenciones de ocupamiento ilegal de su cordón forestal. Esta zona equivale al 70 % del área total de la municipalidad.
El gobierno de la ciudad de Cali formó un equipo de trabajo con el que busca que su cinturón verde permanezca protegido de invasiones y también que se reaccione oportunamente ante tales ocupamientos ilegales.
“Vamos a prevenir con los gestores ambientales y también estamos en capacidad de reaccionar antes de 48 horas de haberse detectado la posibilidad de la invasión de zonas forestales”, explicó María Ximena Román, secretaria de Seguridad de Cali.
Justamente el gobierno local frustró en febrero pasado un intento de invasión del ecoparque cerro de La Bandera. De acuerdo con la secretaria Román, su despacho avanza actualmente en los trámites de judicialización de los invasores que pretendieron asentarse en estos terrenos.
La ciudad de Cali tiene un área total de 56.025 hectáreas, de las cuales 12.125 corresponden a zona urbana y 43.900 a zona rural. De esa área rural el 23 % corresponde a la Reserva del Parque Nacional Natural de los Farallones, el 18 % a la Zona de Reserva Forestal, el 11 % a la zona rural campestre y el resto se distribuye en usos destinados a urbanización, sub-urbanización y explotación agrícola en la llanura aluvial.
El equipo interdisciplinario que trabaja en la protección de este cinturón está coordinado por el Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente (DAGMA) y está dotado de herramientas operativas y técnicas.
La estrategia implementada ha permitido que no haya a la fecha ninguna intención de invadir esos terrenos municipales. “Ninguna ha prosperado en los últimos dos meses”, enfatizó Román.
