La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, fue la ponente principal en el Congreso de Soluciones Metropolitanas Metro Solutions organizado por el Área Metropolitana de Barcelona (AMB). Aquí explicó la estrategia del cuidado que hoy desarrolla en su ciudad y enfatizó sobre la necesidad de la cooperación entre ciudades para fortalecer la gestión metropolitana.
LA Network dialogó con la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, para conocer cuáles son los temas que propondrá la ciudad para que sean liderados desde las redes de ciudades y cómo ve el futuro metropolitano en su región.
Por lo menos 2.600 millones de personas viven actualmente en 1.934 metrópolis, que representan casi el 60 % de la población urbana mundial. 34 metrópolis han superado los 10 millones de habitantes; mientras que 51 tienen una población de 5 a 10 millones; 494 de 1 a 5 millones; y 1.355 de 300.000 a 1 millón.
Bogotá es una de esas 34 metrópolis con más de 10 millones de habitantes. Y bajo el liderazgo de la alcaldesa Claudia López, ha venido desplegando un protagonismo internacional que hoy tiene a la capital colombiana en las redes urbanas globales más importantes. Recientemente Bogotá asumió la presidencia del Centro Iberoamericano de Desarrollo Estratégico Urbano CIDEU y también de Metrópolis, una plataforma global para el intercambio de información, buenas prácticas y experiencias entre ciudades que reúne a 130 urbes de todo el mundo.
Justamente, en función de ese liderazgo, la alcaldesa Claudia López participó en el Congreso de Soluciones Metropolitanas Metro Solutions organizado por el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) en la ciudad de Barcelona (España). LA Network dialogó con ella para conocer cuáles son los temas que propondrá la ciudad para que sean liderados desde estas redes y cómo ve el futuro metropolitano en su región.
¿Cuáles serán los temas que liderará Bogotá desde las recientes presidencias de CIDEU y de Metrópolis?
Bueno, realmente estás dos organizaciones tienen un propio plan acordado por todos sus miembros, no es que la presidencia llega a decidir un tema. Pero, de común acuerdo en la asamblea general global que hicimos de CIDEU en junio y también en la de Metrópolis, acordamos enfocarnos en ambas redes globales en el tema del cuidado como tema de ordenamiento territorial. Y esto es que no nos parezca normal que la pobreza de las mujeres y la feminización de la pobreza es la contracara de la seguridad social que no existe en el mundo formal de nuestras ciudades. Entonces cómo ofrecemos servicios de cuidado como parte de nuestra estrategia, porque a todo mundo le parece normal que tengamos servicios de transporte, de educación o de salud y así mismo debería parecernos normal también tener servicios de cuidado que reconozcan a las mujeres, reduzcan y releven a las mujeres de esa sobrecarga de cuidado no remunerado. Ese es un tema que hemos decidido incorporar y trabajar académicamente, generar instrumentos en ambas organizaciones. Y, en Metrópolis en particular, estamos muy interesados en trabajar con la formación de las nuevas ciudades, con la Nueva Agenda Urbana, con la aplicación de esa agenda distinguiendo diferentes tipos de ciudades; hay muchas ciudades que están en formación, van a ser metrópolis pero están en proceso de formarse y podrían aprender mucho de las metrópolis que ya se formaron y que tienen problemas de informalidad en su organización territorial o de inequidad, excesiva segregación territorial; entonces, cómo aterrizar la Nueva Agenda Urbana y los Objetivos de Desarrollo Sostenible a la formación de ciudades. Y, en tercer lugar, también aplica en ambas redes globales, pero especialmente en Metrópolis, el tema de cambio y emergencia climática, cómo esto debe ser un elemento de ordenamiento territorial, de cambio de los patrones de vida urbana y de organización productiva. Yo diría que alrededor de esos tres temas: Nueva Agenda Urbana, el cuidado y cambio climático, gira principalmente nuestra agenda.
Decía usted en su conferencia de hoy en el Congreso de Soluciones Metropolitanas que más que competir entre ciudades, el objetivo debe ser cooperar entre ciudades. ¿A qué se refiere con esta afirmación?
Las ciudades son, por definición, mecanismos de cooperación. A las ciudades la gente viene a cooperar. Las ciudades no son solamente una aglomeración, son una aglomeración cuya potencia depende de que son heterogéneas, diversas en su composición racial, étnica, de edades, de tipos de familias, de tipos de actividades. Las ciudades somos, por definición, espacios de cooperación, para crecer juntos, para sumar y no restar y dividir a diferencia de los estados nación que a veces tienen una lógica de competir, restar y dividir. Las ciudades, por el contrario, desde nuestros orígenes históricos somos sitios donde se suma, se multiplica y se crece juntos, y creo que hay que fortalecer a escala metropolitana, no solo municipal sino a escala metropolitana, esta lógica que necesita el mundo para tener paz y para tener sostenibilidad.
En ese sentido, ¿Cómo avanza la Región Metropolitana Bogotá Cundinamarca? ¿Qué está haciendo falta para su conformación? ¿Cómo articular mejor ese trabajo en un territorio tan complejo y con más de once millones de habitantes?
La Región Metropolitana de Bogotá Cundinamarca es una figura en nacimiento, apenas va a nacer: necesitó una reforma constitucional, que ya se hizo; necesitó una ley orgánica, que ya se aprobó; y ahora necesita que la Gobernación de Cundinamarca y Bogotá se vinculen a la región legalmente para nacer formalmente. La Gobernación de Cundinamarca y la Asamblea Departamental ya aprobaron la vinculación de Cundinamarca a la región, y justamente en este mes de octubre del 2022 el Concejo Distrital tiene en sus manos la decisión de que Bogotá se vincule; si el Concejo nos autoriza y Bogotá se vincula, se crea formalmente la Región, empieza a operar y el siguiente paso será invitar a los demás municipios de Cundinamarca a que se vinculen a través de la autorización de sus concejos.
Mencionaba usted que es clave en figuras como esta que haya un mismo sistema fiscal y unos mismos estándares para que realmente sea efectiva.
Yo sí creo. La cooperación necesita incentivos claros para que no haya oportunismo sino acción colectiva. En lo que sea que se defina, áreas o regiones metropolitanas, en mi opinión las tarifas fiscales, los estándares urbanos y ambientales no deberían ser diferenciales; no se trata de que un municipio compita teniendo estándares más bajos que otro o teniendo estándares fiscales para robarle a este un proyecto o una industria, no se trata de competir sino de cooperar, y por eso el piso en esos tres temas: fiscales, urbanos y ambientales, deberían ser iguales.