El modelo BRT fue creado en Curitiba en la década del 70 y rápidamente se convirtió en una referencia para otras capitales brasileñas y hasta otros países.
Como una manera de valorar las características que tienen los buses rojos del transporte público de Curitiba, conocidos como «vermelhão», la serie Mirada Curitiba, del fotógrafo del Gobierno local, Luiz Costa, muestra cómo se transformaron los autobuses en protagonistas de la vida de la ciudad y su actividad turística, y la acompañó de un ensayo mostrando la relación que el transporte tiene en el día a día de la capital paranaense.
Luiz define el sistema de la ciudad como un transporte modelo. Las fotos que integran la serie se enfocan en el aspecto poético y de movimiento del cotidiano curitibano. Igualmente, revelan la relación de las personas con los autobuses, retratando las distintas miradas que se cruzan entre las ventanas, mientras la ciudad pasa casi inadvertida en un abrir y cerrar de ojos.
En las imágenes, la velocidad también es un factor importante destacado por Luiz Costa. Las fotos destacan la movilidad que los autobuses ligeros y expresos dan a los habitantes de la ciudad. A su vez, los canales por donde circulan los biarticulados pueden ser definidos como “venas de la ciudad, que unen un punto al otro transportando miles de realidades y sueños”, afirma el fotógrafo.
Según el autor de la serie Mirada Curitiba, las terminales de integración siempre fueron puntos de encuentros de amigos, familiares y novios. Además, el sistema de la ciudad viene evolucionando con el paso de los años, con la llegada de los biarticulados y los buses ligeros. De su lado, desde marzo la línea Santa Cándida-Plaza de Japón, opera en la ciudad y la Alcaldía está finalizando el proyecto para la segunda etapa de la línea Norte-Sur, del Santa Cándida hasta el Capão Raso.
El modelo BRT (Bus Rapid Transit) fue creado en Curitiba en la década del 70 y rápidamente se convirtió en una referencia para otras capitales brasileñas y hasta otros países. Entre los meses de marzo y julio fueron más de 76 millones de pasajeros quienes utilizaron el sistema del transporte colectivo de Curitiba.
